sábado, 16 de junio de 2012

Merkel Cell Carcinoma NBC6 4-11-07 - Flor A. Mayoral MD.wmv

NOTICIA

Descubren un virus relacionado con un cáncer de piel muy agresivo
Este cáncer suele aparecer entre los 60 y 80 años

Un nuevo tipo de virus, desconocido hasta ahora, podría ser el causante de un agresivo cáncer de piel, el llamado carcinoma de células de Merkel. Científicos de la Universidad de Pittsburgh (en EEUU) han empleado una novedosa técnica de secuenciación genómica para descubrir el origen de este tipo de tumor, que afecta sobre todo a personas mayores y a pacientes con el sistema inmunológico debilitado.


Precisamente las características de los pacientes más susceptibles a padecer este cáncer de piel hizo sospechar a los investigadores que el origen del tumor podía estar en algún tipo de agente infeccioso, capaz de atacar a las personas inmunodeprimidas. El carcinoma de células de Merkel, aunque sigue siendo poco frecuente, ha triplicado su incidencia en los últimos veinte años y resulta una de las variedades de cáncer más agresivas, ya que la mitad de los afectados muere transcurridos nueve meses o menos desde el diagnóstico. Suele presentarse en forma de bultos indoloros y brillantes, generalmente en las zonas del cuerpo más expuestas al sol (cabeza, cuello y extremidades).


El matrimonio formado por los doctores Huichen Feng y Masahiro Shuda comenzó sus investigaciones en este terreno hace una década, cuando ambos trabajaban en los laboratorios de la Universidad de Columbia, el centro donde descubrieron también el virus causante del sarcoma de Kaposi (el tumor más frecuente entre los pacientes con sida).
El fruto de este trabajo puede leerse en el último número de la revista
'Science'.

PRONÓSTICO

Con el paso del tiempo se ha visto que la malignidad del CCM es comparable a la producida por el melanoma o el cáncer de células pequeñas del pulmón. La tasa de sobrevivencia a 5 años de los pacientes con CCM es de 50% a 68%. La sobrevida esta íntimamente relacionada con el estadio del CCM al momento del diagnóstico. En publicaciones recientes, la sobrevida a cinco años en pacientes en estadio I es de 64%, con una sobrevida media de 30 meses para estadio IA y 26 meses para estadio IB. Para el estadio II el rango de sobrevida fue de 46% con una sobrevida media de 18 meses y para el estadio III la media de sobrevida fue de 5 meses, con una sobrevida a cinco años de 0%.                                               El rango de recurrencia del CCM es de 55% a 79%, principalmente en el lugar de la lesión primaria o en los linfonodos  regionales, presentándose en los 6 a 12 primeros meses del diagnóstico. La mayoría de los pacientes fallece por la enfermedad diseminada en linfonodos, pulmón, cerebro, hígado y hueso.                                                                                                 La detección precoz mejora el pronóstico de estos pacientes. No se dispone de trabajos publicados que establezcan el rol de la presentación clínica, las características de la lesión o el tiempo que transcurre entre la aparición del tumor y la certificación histopatológica, pero sí se han identificado algunos factores pronósticos útiles en la evaluación de estos pacientes.

Factores de buen pronóstico:

-          Diagnóstico en estadios iniciales.  

-           Ausencia de compromiso de linfonodos.     

-          Localización de la lesión primaria en cabeza y cuello.         

-           Tumor de menos de 2 cm de diámetro.     

-          Sexo femenino.             

-           Ausencia de comorbilidad.

Factores de mal pronóstico:

-          Estadios III y IV en el momento del diagnóstico de la enfermedad o estadio I y II que se diseminen durante su evolución. Promedio de sobrevida esperado de 8 meses.

-          Características histológicas (alto índice mitótico o positividad al ki67, e invasión vascular y linfática).   

-          Gran tamaño tumoral (mayor a 2 cm).

-          Localización en piernas, cabeza y cuero cabelludo (probablemente debido a la resección con menores márgenes por razones estéticas o funcionales) y mucosas.                                                                                                                                                                                                                                

A pesar de la agresividad del CCM, con un diagnóstico precoz, resección óptima con márgenes suficientes y radioterapia postoperatoria, se puede lograr el control locoregional del tumor y una sobrevida a más largo plazo. Incluso existen reportes que informan un 50% de curación total.  Finalmente basados en la literatura médica revisada podemos concluir que el carcinoma de células Merkel es una rara neoplasia maligna de la piel de origen endocrino de comportamiento muy agresivo. Habitualmente ocurre en personas mayores de 50 años. Tiene una alta propensión a la recurrencia post tratamiento y las tasas globales de supervivencia a 5 años varían entre el 23% 80%.                                                                                                                                      La rareza de la enfermedad explica la falta de trabajos prospectivos randomizados que estandaricen el manejo de los pacientes. Generalmente los enfermos son tratados con cirugía como terapia de primera línea, complementados con radioterapia y eventualmente con quimioterapia.

El uso de terapias complementarias en el CCM permanece controversial. Los datos de casuísticas aisladas y metanálisis de series sugieren que la adición de radioterapia complementaria a la cirugía confiere beneficios significativos consiguiendo reducir las recidivas locales y regionales de la enfermedad prolongando así la supervivencia libre de enfermedad. Generalmente, la literatura no apoya el uso de quimioterapia en estos pacientes.

Se han esbozado regímenes específicos de tratamiento para los estadios I a III mediante distintas combinaciones de cirugía, radiación y quimioterapia, mientras que el énfasis del tratamiento en pacientes con la enfermedad en el estadio IV se sustenta en la terapia paliativa con o sin radio o quimioterapia. Faltan aún mayores ensayos clínicos para poder establecer la terapia más efectiva para los CCM.

SEGUIMIENTO


 
Debido al diagnóstico tardío y a la alta tasa de recurrencia, los pacientes con CCM deben ser controlados periódicamente posterior al tratamiento, especialmente en los dos años siguientes, ya que se ha visto altos porcentajes de recurrencias local durante los primeros 8 meses y de metástasis a distancia antes de los 18 meses

TRATAMIENTO

El manejo del cáncer de células de Merkel es controvertido y aún no existen ensayos terapéuticos controlados para esta patología que aseguren un esquema terapéutico 100% efectivo. En la literatura se proponen diferentes esquemas, descritos a continuación, no obstante en la mayoría de los casos la cirugía sigue siendo la alternativa terapéutica por excelencia. Habitualmente, se indica escisión quirúrgica amplia radioterapia postoperatoria y se sugiere biopsia del linfonodo centinela. En un análisis de 22 publicaciones se encontró que el tratamiento más utilizado y que optimizó la sobrevida y la tasa de recurrencia fue la cirugía más radioterapia. Un estudio de 38 pacientes encontró un incremento en la sobrevida libre de recurrencia al comparar la cirugía sin radioterapia con el tratamiento con radioterapia, 75.2% vs. 52.9% (P: 0.02).                                                                                                                             El uso de quimioterapia coadyuvante no ha demostrado que mejore la sobrevida y se ha visto que deteriora la calidad de vida, por lo que aún no está clara su indicación.                                  Para la enfermedad local se recomienda una resección amplia con 2 a 3 cm de margen libre, lo que muchas veces no es posible si la lesión se encuentra en zonas especiales como cara. Se ha propuesto para este problema la microcirugía de Mohs, la cual se ha visto que es más efectiva en el control de la enfermedad local, además como el tumor tiende a crecer verticalmente, esta técnica permite resecar el compromiso a profundidad (incluso músculo), permitiendo resecar la totalidad del tumor. La microcirugía de Mohs permite reducir los márgenes a 1,5 cm.                La resección linfonodal ha demostrado disminuir la metástasis a distancia, pero no se ha establecido aún su efecto en la sobrevida. Se ha descrito que disminuye la recurrencia de un 65% a un 27%. Todavía se discute si es preferible optar por la biopsia del linfonodo centinela o por la resección linfonodal electiva. La biopsia del linfonodo centinela ha mostrado ser muy útil en la determinación del estadio de la enfermedad, tratamiento y pronóstico.                                La radioterapia postoperatoria en el lugar de la lesión primaria, en los linfonodos regionales y en los linfonodos positivos en la enfermedad diseminada (con o sin resección de linfonodos), disminuiría en la mayoría de los pacientes la recurrencia de la enfermedad, y también ayudaría en los casos en que la resección total del primario no es posible.                                                 El uso de quimioterapia  aún no está recomendada como protocolo de tratamiento y a pesar de que algunos cánceres de células de Merkel son quimiosensible no existen experiencias que demuestren una real utilidad. Por otra parte, la mayoría de los pacientes son de edad avanzada y no vulnerable a quimioterapias agresivas. Las drogas más utilizadas son las usadas en cáncer de células pequeñas del pulmón y en tumores neuroendocrinos. El esquema que más se recomienda en la literatura es la combinación de carboplatino y etoposide. Otros agentes utilizados incluyen doxorubicina, vincristina, ciclofosfamida, VP–16 y con menor frecuencia se opta por vinblastina, con antraciclinas y 5- fluorouracilo. Los estudios se han realizado principalmente en pacientes con enfermedad local o locorregional.                                           

Se han estudiado ciertos aspectos que apoyan la no utilización de la quimioterapia en CCM:

-          La quimioterapia coadyuvante no ha demostrado aumentar la sobrevida; un estudio mostró que la sobrevida a 4 años en un grupo de 23 pacientes tratados con QMT fue de 42%, comparado con otro grupo de 53 pacientes que no recibió QMT en donde la sobrevida fue de 60%.

-          La quimioterapia está asociada con mortalidad ligada a tratamiento; el reporte con mayor número de pacientes  mostró muerte por toxicidad en un 3,4% y dentro de los pacientes mayores de 65 años un 16% murió por complicaciones de las drogas.

-          La quimioterapia implica mayor morbilidad. Al respecto en el más grande ensayo clínico realizado, un 63% experimentó toxicidad cutánea grave con descamación en las zonas irradiadas y un 40% de los pacientes fue hospitalizado por neutropenia.

-          El uso de quimioterapia ha sido sugerida en tumores biológicamente diferentes al CCM; por ejemplo el cáncer de células pequeñas de pulmón responde a QMT, pero esta neoplasia maligna tiene presentación, pronóstico y comportamiento diferente al cáncer de células de Merkel.

-          Frecuentemente se observa resistencia a la quimioterapia. Inicialmente sólo un 40 a 70% de los CCM son sensibles a la quimioterapia con una respuesta parcial o completa.

-          El sistema inmune es fundamental para controlar el CCM y se han observado pronósticos más deletéreos en pacientes inmunocomprometidos.

 

 

Considerando los estadios del CCM se proponen las siguientes alternativas terapéuticas:

-          Estadio I: Cirugía con resección amplia mediante cirugía convencional o técnica de Mohs más radioterapia postoperatoria. En la mayoría de los estudios se recomienda el uso de la biopsia del linfonodo centinela. Con este esquema se ha visto una sobrevida a 5 años de 64%. La disección electiva de linfonodos es el único factor que afecta y aumentaría la sobrevida libre de enfermedad. La radioterapia sigue siendo recomendada para el control locorregional aunque no asegura la ocurrencia de diseminación a distancia (36%). La microcirugía de Mohs es considerada la mejor opción del control del primario (menos recurrencia local) y su rendimiento se optimiza si se añade radioterapia. Se ha establecido que la recurrencia local aumenta cuando no se han logrado márgenes adecuados y no se ha complementado con radiación postoperatoria. En general reciben rangos de 30 a 70 Gy o de 45 a 50 Gy de radioterapia. La QMT continúa teniendo un uso experimental.

-          Estadio II: Debe considerarse la resección quirúrgica de la lesión primaria, disección linfonodal y radioterapia (50 a 60 Gy) en el sitio del primario y en los territorios linfonodales regionales. La quimioterapia debe ser considerada juiciosamente y sólo en pacientes de alto riesgo.

-          Estadio III: Los órganos más afectados por metástasis del CCM son hígado, hueso, pulmón, cerebro y piel. El tratamiento consiste en quimioterapia (para pacientes con enfermedad generalizada o enfermedad local avanzada), radioterapia paliativa (en hueso, cerebro y piel) y si es posible cirugía en algunos casos6. El pronóstico de estos pacientes es ominoso, se estima una sobrevida de alrededor de 8 meses entre el diagnóstico y la muerte.

-          La toxicidad de los tratamientos efectuados es reportada escasamente. En una serie de 53 pacientes tratados con cirugía, radioterapia y quimioterapia se observaron reacciones cutáneas de grados 3 y 4, neutropenia grado 3 y neutropenia febril. En los pacientes que mostraron reacciones tóxicas agudas se constató una disminución en la calidad de vida. En un estudio de 107 pacientes que sólo recibieron quimioterapia el efecto adverso que ocurrió con mayor frecuencia fue la mielosupresión y la agranulocitopenia; se registraron 9 muertes, de las cuales 7 fueron secundarias al tratamiento quimioterápico de primera línea y 2 al tratamiento de segunda línea. El shock séptico asociado a neutropenia febril fue la causa relacionada al tratamiento más frecuente.

ESTADIFICACIÓN

El estadio del cáncer de células de Merkel  tiene gran importancia para establecer el pronóstico y el tratamiento a ofrecer. Aún no existe acuerdo en la clasificación de los estadios de cáncer de células de Merkel, sin embargo aquella sugerida por Yiengpruksawan del Departamento de cirugía del Memorial CancerSloan-Kettering de Nueva York es ampliamente usada:

- Estadio I: Enfermedad confinada a la piel.
- Estadio IA: tumores < de 2 cm de diámetro máximo.
- Estadio IB: tumores > ó = de 2 cm diámetro máximo.
- Estadio II: Diseminación linfonodal regional.
- Estadio III: Diseminación linfonodal más allá de los linfonodos regionales y/o metástasis a distancia.

Otra clasificación utilizada es la de la Unión Internacional Contra el Cáncer (UICC):
- Estadio I y II para la enfermedad local.
- Estadio III para enfermedad regional.
- Estadio IV para enfermedad diseminada, con tamaño del tumor primario mayor o menor a 2 cm, con o sin compromiso de linfonodos regionales, pero con metástasis sistémicas.

La búsqueda de metástasis a distancia debe ser evaluada con tomografía computada o con resonancia magnética de tórax, abdomen y pelvis. Si se descubren masas tumorales en pulmón es importante descartar que no sea un tumor de células pequeñas, ya que este tipo de neoplasia puede metastizar a piel. El uso de la tomografía por emisión de positrones ha demostrado ser útil en el diagnóstico de cáncer de células de Merkel  y en el seguimiento post quimioterapia de recurrencias.                                                                                                                                            En 1992, Kwekkeboom y colaboradores notaron la presencia de receptores de somastatina en las células de cáncer de células de Merkel, por lo que se propuso el uso de cintigrafía para la detección de metástasis, las cuales captan un análogo de somastatina llamado octreotide, cuyo uso terapéutico se está investigando.

CLÍNICA


No existe un patrón clínico característico que sugiera un cáncer de células de Merkel. A partir de las diferentes experiencias clínicas se describen los siguientes hallazgos:
- Sintomatología: En la mayoría de los casos las lesiones con que se manifiesta el cáncer de células de Merkel son asintomáticas (88%) y el paciente consulta al médico debido al rápido crecimiento en pocas semanas o meses de dichas lesiones y al cambio que éstas van presentando.
- Características de la lesión: El cáncer de células de Merkel generalmente se manifiesta como un nódulo cutáneo o subcutáneo firme, único, de rápido crecimiento, indoloro, rosado - azulado o castaño rojizo, generalmente de aspecto benigno. La piel que cubre la lesión es suave, lisa y brillante, rara vez ulcerada, siendo a veces posible encontrar telangectasias o lesiones acneiformes, pero no es lo común. Los nódulos suelen tener un tamaño de entre 0,5 a 5 cm (habitualmente son menores de 2 cm al momento del diagnóstico). Es corriente que exista compromiso del sistema linfático de la dermis dando origen a lesiones satélites múltiples.


 
 
Carcinoma de células de Merkel con aspecto de nódulo cutáneo.


 
- Ubicación: El cáncer de células de Merkel predomina en las zonas fotoexpuestas, presentándose en cabeza, cara (principalmente en párpados), y cuello en alrededor de un 50% de los casos, en extremidades en un 40%, y en un 10% en tronco y glúteos. Con menor frecuencia se observa en mucosas perianal, nasal, oral, faríngea y laríngea, siendo las localizaciones en vulva y pene las de peor pronóstico.
- Forma de presentación: Al momento del diagnóstico se ha observado que el cáncer de células de Merkel se presenta como enfermedad localizada en un 70% a 80%, seguida de compromiso linfonodal regional en un 9% a 26% y metástasis a distancia en un 1% a 4%. Existen series que comunican que un 14% de los pacientes presenta metástasis linfonodales sin enfermedad primaria identificable. Crecimiento en superficie de forma semiesférica y en profundidad como un iceberg.
- Velocidad de crecimiento. El 63% de los pacientes experimenta un rápido crecimiento de la lesión primaria en tres meses.


- Diseminación: El cáncer de células de Merkel frecuentemente se extiende a piel en un 28%, linfonodos en un 27%, hígado en un 13%, pulmones en un 10%, hueso en un 10% y cerebro en un 6%. Se ha descrito casos de metástasis a leptomeninges. La piel y los linfonodos acaparan alrededor del 60% de las metástasis.

- Diagnóstico diferencial:La hipótesis diagnóstica de cáncer de células de Merkel generalmente no se plantea como primera opción. En la mayoría de los pacientes, se postulan otras patologías como quistes epidérmicos en un 32%, lipoma 6%, dermatofibroma o fibroma 4% y lesión vascular en un 4%.

Se ha propuesto la siguiente fórmula nemotécnica en ingles para resumir las características clínicas del cáncer de células de Merkel:

AEIOU

A: Asintomático.
E: Expansión rápida.
I: Inmunodepresión.
O: O tener mas de 50 años (Over 50 years)
U: Ultravioleta, exposición a los rayos UV.